martes, 14 de julio de 2009

Una Reflexión

Otra vez encuentro mis arcas vacías
Rotas mis ilusiones,
Desfondadas mis fuerzas.

Recorro calles,
Miles de metros,
Consumo infinitud de segundos
Y jamás le miro el alma a nadie…

Afilo estos colmillos
y estos varios pares de dientes
Que la evolución jamás reducirá,
Para zamparlos en tus muslos y en tu cuello.

Tengo lengua
y saboreo el dulce de tus ojos
y tu encéfalo,
la acidez de tu piel y el agrio de tu sexo,
la sal de tu nostalgia,

Porque no puedo,
Porque soy yo en la vorágine anhelante,
Soy esta punzada en la razón,
Este paso a través del espejo,
Este objeto devorado.

jueves, 5 de febrero de 2009

Sobre el hambre

Uno no puede imaginar la dicha de un estudiante alimentándose en un país de miserables. "El hambre me carcomió el corazón, el hambre ensombreció mi razón, cuando tuve hambre sentí que era incapaz de morir, cuando satisfice mi deseo sentí el dolor de no vencer el egoismo. ¿Existirá un placer mayor al de engullir y destrozar un cuerpo inherte - sea vegetal o animal- un cuerpo derrotado, en un festín horrible llamado cena, para regocijo del vencedor y peor aun para lucrarse de esa necesidad y de ese placer?"